lunes, 3 de junio de 2013

El tiempo te dará la razón.


Bienvenidos una semana más a 7Artes. Hoy volvemos a reflexionar y lo haremos de la forma más respetuosa posible, dado que siempre hay alguien que se ofende. El tema de hoy creo que no ofenderá a nadie, pero nunca se sabe. Gente rebuscada y con la escopeta cargada hay en todas partes.

La reflexión de hoy trata sobre la expresión “El tiempo me dará la razón”. Mucha gente se aferra a esta expresión para sentirse bien cuando la gran mayoría le da la espalda y él tiene la razón. Pocas veces esta expresión será usada por el que sabe que no lleva razón, ya que el ser humano es falso, hipócrita y se autoengaño con mucha facilidad, pero no es capaz de engañarse a si mismo cuando se habla del tiempo.

El tiempo tiene un peso enorme sobre las mentes de las personas. Ya no solo en el ámbito del miedo a envejecer, a perder el contacto con la gente o el gran miedo a que el tiempo destroce lo que un día fue amor. La gente le teme al miedo porque es un gran justiciero. El otro día hablábamos de justicia poética y, en este caso, el mayor precursor de dicha justicia es el tiempo.

El tiempo pone a cada persona en su sitio. Nadie finge eternamente. Al mentiroso se le pilla con el tiempo. La mentira tiene las patas cortas y el tiempo las tiene largas, aunque su tronco es corto. Y es corto porque el tiempo corre y a su vez, hace la vida corta. Tan corta, que el tiempo no es capaz de ser injusto con el que no lo merece. Es por ello que siempre acabará susurrando la verdad entre el viento, como un buen vino cuando choca con los labios.

Siempre dará la razón al que la tiene. Quien sabe que la tiene, pero no se la dan, se escudará en el dichoso dicho, valga la redundancia. Es el escudo de los desahuciados por la mentira generalizada y es la balsa que los mantiene a flote mientras se resuelve la injusticia cometida. Y el tiempo será justo. Y les dará no solo la razón, si no algo más. Les dará la verdad absoluta en ese terreno. Les dará la credibilidad que no tuvieron en su día, aumentada por tres. Les dará disculpas, les dará satisfacción personal y, porque no decirlo, les dará venganza. Venganza suave y calculada.

No es la sed de venganza lo que mueve al que espera que el tiempo sea buen juez. Lo que mueve a esa persona es la justicia, la verdad, la honestidad y salvaguardar su honor. Hoy en día ya nadie se preocupa de conservar el honor. Conservan la imagen pública, la visión social que tienen de ellos. Eso no es el honor y, de hecho, muchas veces venden el honor a cambio de la imagen que quieren dar.

En mi caso, el tiempo me ha dado muchas veces la razón y, otras tantas, me la ha quitado. Cuando me ha quitado la razón, no esperaba tenerla. Cada uno tiene su punto de vista, la verdad de cada uno es “su verdad”. El tiempo dirá cual de las verdades es la absoluta. Aunque en este mundo no hay nada absoluto.

En muchas ocasiones te sentirás solo y repudiado. Sentirás que nadie te da la razón, que no es justo lo que te está pasando y que todo debería ser visto de otra forma. En ese caso, hay dos posibles opciones. Primero, que lo que te está pasando te lo mereces realmente, por tu actitud, por tus tonterías y un largo y complicado etcétera. Segundo, en verdad es injusto y por tanto, el tiempo te dará la justicia que un día se te negó.
Y esto ha sido todo por hoy. Espero que tomen bien el consejo que les doy. Un saludo y feliz semana.


Aarón Hernández. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.