Vampiros y Bananas.

Hoy volvemos al cine. Traigo de nuevo dos buenas películas como la noche y el día. El único punto en común es que los dos directores y guionistas son genios. Traigo una de Robert Rodríguez con guión de Quentin Tarantino y otra escrita y dirigida por el inigualable Woody Allen.

Dos películas cuyo principal objetivo es entretener, aunque la de Allen tiene un objetivo más instructivo quizás.

Sin más preámbulos inicio mis criticas de hoy.

Abierto hasta el amanecer (1995)

La primera película es una de las más grandes colaboraciones entre dos amigos como Tarantino y Rodríguez. Ambos amantes del mismo género hacen la dupla perfecta para este film.

Protagonizado por George Clooney y el propio Tarantino como los hermanos Gecko, Seth y Richard, respectivamente. Ambos hermanos han robado un banco y viajan a México para huir de la justicia y asentarse en El Rey. Su contacto allí es Carlos (Cheech Marin).

Para llegar hasta allí antes paran en un motel donde cogen como rehenes a una familia compuesta por un pastor que ha perdido la fe, Jacob (Harvey Keitel) y sus dos hijos Scott (Ernest Liu) y Kate (Juliette Lewis). Junto a esta familia y su caravana, los hermanos Gecko llegan a México y entran en el bar "La teta enroscada" donde han quedado con su contacto.

"La teta enroscada" esta abierto hasta el amanecer y deciden pasar la noche de juerga allí. Incluso la familia del pastor y los Gecko hacen buenas migas, pese a las obsesiones sexuales de Richard Gecko.

Sin embargo las cosas se complicarán cuando descubran que las bailarinas y el servicio de este bar no son nada habituales. Jacob deberá recuperar su fe para hacer frente a las criaturas del infierno que pueblan el bar.

El guión, de Tarantino, es en la línea del cineasta de Tenesse. Mucha violencia, conversaciones peculiares y diálogos trepidantes.

La dirección iba a ser también para Tarantino, pero decidió dejarle el honor a su amigo Robert Rodríguez. Una dirección cuidada y que sabe captar a la perfección la tensión de cada momento.

La película es un claro homenaje a las películas de serie B y Z. Y no goza de unos efectos especiales espectaculares ni mucho menos.

Los actores hacen un trabajo excelente. Clooney de tipo duro encaja a la perfección. Tarantino nos muestra sus grandes dotes como actor interpretando a un autentico y creíble perturbado mental. Keitel en su línea, fantástico el trabajo del actor fetiche de Tarantino. Y los chicos Liu y Juliette Lewis hacen un gran trabajo y adquieren peso en la trama.

Especial mención a Salma Hayek y su sensual baile, ya mítico en el mundo del cine. También gran trabajo, dentro de lo que cabe, de Tom Savini y Fred Williamson como dos clientes de "La teta enroscada", que se unen a la lucha.

La banda sonora es buena, con Tito & Tarántula como banda que toca en el local en el que se desarrolla la acción.

Buena película si buscas entretenimiento y acción. No mucho más.

Mi puntuación es de 5'78.

Bananas (1971)

Tercera película que dirigió Woody Allen. En la línea de sus primeras películas, el film es una crítica a las repúblicas bananeras y tiene ese toque de humor tan similar a los hermanos Marx que encumbró a Allen.

La película narra la historia de un pequeño país sudamericano llamado San Marcos y como esta oprimido por un dictador, el General Vargas. Mientras que existe una resistencia liderada por Espósito y sus hombres.

Entre tanto en Manhattan, un común probador de estrafalarias máquinas, Fielding Mellish (Woody Allen) conoce a una partidaria de la revolución de San Marcos, Nancy (Louise Lasser), con la que emprende una relación que le lleva a ir de voluntario a San Marcos, pese a que la relación se acaba, ya no hay vuelta atrás y Mellish acaba en San Marcos.

Vargas lo invitará a cenar para ponerlo a prueba y después intentar asesinarlo, para acusar a los rebeldes y recibir ayuda de EEUU. La operación fracasa y Mellish se une a la revolución. Tras la victoria de los rebeldes, Mellish se convertirá en presidente de San Marcos y volverá a EEUU donde volverá a encontrarse con Nancy y vivirá alocadas situaciones.

El guión de Allen es, al igual que la dirección, una maravilla. Con un fantástico ritmo, la película esta llena de gags y sorprende por su fantástica crítica al mal uso de los ideales. Con mucha alusión a la revolución cubana y a Fidel Castro.

Allen interpreta un soberbio papel de nuevo y, su ya ex-mujer por aquel entonces, Louise Lasser lo acompaña como la mujer bonita de este film. Carlos Montalbán como el general Vargas da el contrapunto de villano y el elenco es coral y solvente. Mención al papel casi figurativo de un jovencisimo Sylvester Stallone como un delincuente en el metro.

Música buena para acompañar a un film divertido y entretenido.

Como comedia mi puntuación es de 6'75.

Y esto ha sido todo por hoy. Mañana más. Échenle un vistazo a estas películas y disfruten. Quieranme.

Aarón Hernández.